Muchas veces habrás visto en los principales Desde chiquitos nos enseñaron que cerrar el año comiendo 12 uvas, una por cada campanada, es la mejor manera de comenzar con pie derecho el nuevo año y la clave para que nuestros deseos se cumplan. Sin embargo, sería mucho mejor si acompañáramos las uvas con 12 tips que nos ayuden a ordenar nuestras finanzas personales. Así que comencemos:
1. Estima los ingresos que vas a recibir durante el año. Esto hará que puedas identificar con cuánta plata dispones para tus inversiones, metas, gastos o deudas.
2. Construye tu plan de gastos básicos (esenciales). Esto te va a permitir entender cuáles son tus gastos fijos (arriendo, servicios, etc.), esos gastos que muy seguramente no cambien en el transcurso del año y de los cuales no te vas a poder librar.
3. Es clave que tengas en cuenta las deudas que tienes (si no las tienes, empezaste ganando). Saber cuánto debes y cuándo tienes que pagar es muy importante pues evita que te cuelgues con estas deudas, lo cual te puede llevar a listas de “morosos” y a que se aumente el valor de la deuda por la acumulación de intereses. Cuando tengas la oportunidad de hacerlo, paga esas deudas que muy seguramente tienen unos intereses altísimos, y ¡por favor! resiste a la tentación de esa nueva tarjeta de crédito que te ofrecen cada dos minutos por Instagram… ¿Sabes cuál es la tasa de interés de tu tarjeta de crédito?.
4. Una vez construido tu plan de ingresos, gastos fijos y deudas, puedes calcular cuáles son tus excedentes (es decir, el dinero que sobra después de pagar lo anterior). Ahora puedes empezar a pensar en qué gastos no esenciales vas a tener. Recuerda que los gastos no esenciales son aquellos gastos a los que podemos renunciar sin afectar aspectos básicos como la vivienda o la alimentación. Un ejemplo sería las suscripciones a plataformas de streaming como Netflix… o las cervecitas del fin de semana.
5. Plantearte metas para tus finanzas, al igual que para tu vida, es muy importante. Debes proponerte objetivos para poder planear la forma de alcanzarlos con tu presupuesto. Este es el primer paso para hacer una planificación de tus finanzas que tenga en cuenta las cosas que verdaderamente valoras, como puede ser comprar una casa, viajar o hacer esa maestría en el exterior que tanto quieres. Una vez entiendas cuánto vas a tener que destinar mes a mes para alcanzar esas metas, haz ajustes en tu presupuesto de gastos no esenciales para asegurarte de poder realizar estos aportes.
6. Toma la decisión de invertir esa plata que estás destinando para tus metas futuras. Recuerda que la plata quieta pierde valor con el tiempo, debido a la inflación, y la forma de prevenir esto es invirtiendo. Los fondos de inversión colectiva, los fondos de pensiones voluntarias e incluso los CDTs (si te gusta la rentabilidad fija) pueden ser buenas alternativas para no dejar tu plata quieta en el banco. ¡Crea un plan de inversión para cada meta que tengas!
7. Busca asesoría para asegurarte de estar invirtiendo en portafolios que sean consistentes con tu capacidad de asumir riesgos y con tus objetivos. Siempre busca invertir con entidades serias que sean vigiladas por la Superintendencia Financiera. Ojo, hay mucho pillo por ahí tratando de vendernos rentabilidades exorbitantes que no existen.
8. Mes a mes lleva una bitácora (¡o un excel!) con tus ingresos y gastos. Esto te permitirá entender qué tan bien vas vs. el presupuesto que construiste y te permitirá entender si estás gastando de más o si tienes alguna oportunidad de ahorro… ¡Bitácora de Buzz Lightyear!
9. No incurras en gastos no esenciales que excedan los límites que te pusiste. Siempre tenemos antojos, pero ser disciplinados con nuestro presupuesto es lo que nos va a permitir lograr esas metas que verdaderamente nos importan y poder lograrlas sin endeudarnos y terminar trabajando para pagarle intereses al banco.
10. Cuida tus ingresos adicionales, como la prima, bonificaciones o algún ingreso que recibas por vacaciones. Aprovecha estas oportunidades para impulsar tus planes de inversión para esas metas que tanto quieres alcanzar.
11. Debes intentar construir un fondo de emergencia. Por más que organicemos nuestras finanzas, siempre puede haber eventos inesperados… No olvidemos el 2020. El hecho de no poder prever el futuro no quiere decir que no podamos prepararnos para las épocas de “vacas flacas”; siempre trata de guardar un porcentaje de tus ingresos para emergencias futuras.
12. Finalmente, busca la manera de aprender un poquito más acerca de finanzas, recuerda que un conocimiento básico de finanzas puede tener un impacto grande en tu capacidad de organizarte y de alcanzar tus metas sin pasar el resto de la vida trabajando para pagar intereses.
Estos tips te servirán para comenzar el año de una manera más clara y organizada, pues tus finanzas personales lo merecen. No te quedes con la ilusión de cumplir los 12 deseos que pediste con las 12 uvas, más bien organízate y cúmplelos con estos 12 tips.